ENSOÑACIONES
Por Raúl Ruiz
Oposición «in crescendo».
Casi desde el arranque del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, sus opositores comenzaron a construir una fuerza golpeadora para reblandecer la administración del nuevo régimen.
En trabajos anteriores, descifré estas sistemáticas acometidas.
Era evidente que algún asesor de Claudio X González, le recomendó, utilizar la estrategia del Golpe Blando, tesis del intelectual norteamericano Gene Sharp, que a grandes rasgos funciona así:
Antes que nada, se denomina golpe de Estado blando, golpe suave, golpe encubierto o golpe no tradicional al uso de un conjunto de técnicas no frontales y principalmente no violentas de carácter conspirativo, con el fin de desestabilizar a un gobierno y causar su caída, sin que parezca que ha sido consecuencia de la acción de otro poder.
De acuerdo con Sharp, la estrategia del «golpe suave» se ejecuta a través de cinco etapas jerarquizadas o realizadas de manera simultánea. Entre ellas, «el cabalgamiento de los conflictos y promoción del descontento, promoción de factores de malestar (desabastecimiento, criminalidad, manipulación del dólar, lockout patronal y otros, denuncias de corrupción a través de medios, promoción de las mismas sin sustento real)». Su principal característica radica en la apariencia de legalidad que, a partir del apoyo de sectores judiciales, mediáticos y de los servicios de inteligencia, busca convencer a una porción de la sociedad civil y la sociedad internacional de que el gobierno surgido de dicho golpe es legítimo.
La operación resulta realizada cuando gobiernos extranjeros alineados al gobierno surgido del golpe apoyan la toma del poder político.
Es una labor sistemática que requiere extremo apoyo económico y la concentración de fuerzas opositoras, que organizada, metódica, y meticulosamente, vayan creando a través de un discurso agresivo, una falsa realidad de la circunstancia política, social y económica, para dibujar una imagen de terror del régimen político que se vive.
Esta fuerza opositora va in crescendo.
Primero actuaron los intelectuales orgánicos a través de publicaciones en medios afines a su ideología.
Luego, una serie de organizaciones civiles creadas por este mismo equipo de golpeo, hasta llegar a FRENAAA y el famoso BOA.
Lo de hoy es el concepto más organizado denominado SÍ POR MÉXICO.
Un revoltijo de organismos políticos y organizaciones de la sociedad civil cuyo discurso es: “construir un país más justo de la mano de las organizaciones de la sociedad civil y la ciudadanía.”
Suponen que la fusión de los partidos políticos vapuleados en las elecciones anteriores, y las organizaciones civiles construidas por ellos mismos como una fuerza de papel, y con el apoyo de los organismos empresariales que todos sabemos carecen de liderazgo real.
La noticia es que se han reunido en una convención nacional los dirigentes del PAN, PRI y PRD, activistas de ultra derecha y, según sus cuentas: más de 500 organizaciones y cerca de 50 mil personas unidas a este movimiento con la misión de “romper los muros que separan a la ciudadanía de lo político y colocar en el centro de la discusión pública las grandes causas de la gente”.
Tienen buena agenda…
Hacer campaña en todo el país contra el gobierno de AMLO, bajo la ensoñación de
• Construir una una nueva mayoría democrática para ganar el 21.
Para lo cual se invitó a más ciudadanas, ciudadanos y organizaciones a sumarse al Sí.
• Hacer que los votos valgan, para hacer realidad la agenda ciudadana, empezando por una campaña de movilización. Y otras acciones que darán a conocer por el camino.
Su problema es que todas estas acciones no salen de su círculo.
No hay conexión con la gente, con la perrada.
Entre ellos mismos se venden la idea que el gobierno de la 4T, es un régimen autoritario, que la vida en México es insufrible y que López Obrador nos está arrastrando a la ignominia.
Se desahogan calificándolo como inútil, ineficiente, pendejo, corrupto, y sobre todo una amenaza latente para la democracia y la sociedad en general.
Sí por México es un esfuerzo de organización para crear un frente político que arrebate el poder en el congreso a Morena.
Un objetivo loable.
Finalmente los partidos políticos y las organizaciones civiles dan equilibrio y salud al quehacer político de la nación.
Pero, según la ciencia de la prospectiva, no les alcanzará la cuerda para llegar al 21 con esa fuerza que requieren para lograr el objetivo.
Mezclar los tamales de chile con los de azúcar solo les causará un empacho con dolores abdominales.
Vamos a ver como se desdobla este animal.
Por lo pronto, voy por mis palomitas.